¿Qué es la coprofagía? 

Ingestión de heces del mismo animal u de otro. Común en caninos, rarísima en felinos. El único comportamiento coprofágico considerado normal es la ingestión de heces de los cachorros por parte de su madre (generalmente desde el nacimientos hasta las 3 semanas de vida de los cachorros), posiblemente para mantener limpia la zona evitando que posibles depredadores se acerquen atraídos por los excrementos.

Puede considerarse natural (no normal) el que ingieran heces de ungulados en los que encuentran varios nutrientes que provienen de las fermentaciones del intestino grueso.

Como consecuencias pueden existir infestaciones recurrentes de parásitos intestinales, y en menor frecuencia, gastroenteritis por la ingestión de grandes cantidades de heces de ungulados.

Un comportamiento que crea duda y asombro en la familia cuando han acogido a un cachorro es cuando se genera cierta fijación por comerse sus propios excrementos o el de otro animal, sea perro o gato por ejemplo. Esta conducta que puede dejarnos en un primer momento algo impactados o sorprendidos es realmente algo bastante común en los cachorros y es una consulta frecuente a los veterinarios, que lo interpretan tomando en cuenta tanto al animal como al contexto en el que desarrolla la acción. 

El origen de la ingesta de materia fecal (coprofagía ) en los caninos es un tema en el que muchas veces los especialistas no se ponen de acuerdo, debido a que puede obedecer tanto a causas físicas como de comportamiento, normales y patológicas.

Los propietarios tiñen sus interpretaciones y tratamientos de acuerdo a su visión cultural del tema y muchas veces no actúan adecuadamente por falta de información, con reacciones que van desde el rechazo o los castigos inútiles hasta el abandono de los animales.

Los motivos de la coprofagía (algunos comprobados y otros discutidos) que llevan a ingerir excrementos a los cachorros pueden ser variados, cuando lo hacen con las heces de sus hermanos y adultos puede considerarse una forma natural de explorar su medio e incorporar flora microbiana, comportamiento que compartirían con otras especies animales. Los que se encuentran aislados, en ámbitos reducidos, sucios o frustrantestienen mayores posibilidades de mantener esta conducta exploratoria.

Suele observarse una atracción a la coprofagía de algunos, hacia las deposiciones de los gatos de la casa; el motivo seria la concentración proteica de las mismas, que resulta de "sabor agradable" para los pequeños.

Es frecuente que cachorritos con dietas carentes de materia vegetal se vean husmeando y comiendo (coprofagía) la bosta de vacas o caballos, es su forma de incorpóralas ya que en estado salvaje los carnívoros la toman, parcialmente digeridas, del contenido visceral de sus presas. 

Deben tenerse presentes las causas físicas que ocasionan coprofagía , como las patologías congénitas o adquiridas del páncreas. 

Lo que resulta claro, independientemente del origen, es que no se debe castigar al animal por coprofagía (un comportamiento que le resulta natural), debiéndose dirigir el tratamiento a prevenir el acceso a las heces o en el caso que el mismo se deba a una conducta de orientación bucal, producir una aversión del sabor con el uso de productos químicos o naturales como la pimienta. 

Uno de los perjuicios de la coprofagía es la posibilidad de infestarse con parásitos, contraer enfermedades virales o causadas por microorganismos que ponen en riesgo la salud, por lo que no debe descuidarse una periódica desparasitación (análisis de materia fecal previo).

En cualquier caso la consulta con su profesional de confianza permitirá aclarar todas las causas, riesgos y soluciones de la coprofagía , merece para brindarle bienestar a su mascota y una interacción segura con los suyos. 

Síntomas 

  • Posibles: halitosis (Mal aliento). Posible poliuria/polidipsia (Mucha orina y mucho tomar agua, anorexia y gastroenteritis como consecuencia de posibles problemas médicos subyacentes a la coprofagía.
  • De Comportamiento: Zona habitable del perro sucia, respuesta al castigo por defecar en lugares inapropiados (imitación del propietario al hacer "desaparecer" las heces?), condiciones estresantes como cambios repentinos en el ambiente, disponibilidad de mucho tiempo sin juegos o con baja actividad (aburrimiento)
  • Médicas: Desde el punto de vista médico se puede pensar en una insuficiencia pancreática, por trastornos de mala absorción intestinal, por Parasitismo, por Diabetes mellitas, por Hipertiroidismo incluso se piensa que puede ser provocado por deficiencias nutricionales.

Ejemplares que tienen una alimentación pobre y escasa, al tener hambre todo el tiempo pueden presentar coprofagía:

  • Insuficiencia pancreática exocrina (es la causa médica más frecuente). 
  • En mucha menor medida, se ha podido también relacionar con: hiperadrenocorticismo, administración de corticoides exógenos, síndrome de mal absorción intestinal, parasitismo intestinal, diabetes mellitus, hipertiroidismo, dietas deficitarias (actualmente no hay suficientes estudios que avalen esta última teoría) Este fenómeno también puede ser consecutivo a un consumo excesivo de alimentos que, al superar las capacidades de digestión y acelerar el tránsito intestinal, produce una disminución de la digestibilidad. En este caso, basta con disminuir la ración cotidiana para normalizar la situación.
  • Por último, cabe señalar que algunos perros que  tienen predisposición a la coprofagía, pueden padecer frecuentemente insuficiencia pancreática. 

Diferentes tipos de Coprofagía 

  • Auto coprofagía: se trata de un animal que come su propio excremento.
  • Coprofagía intraespecífica: se trata de un animal que come excremento de otro animal dentro de su propia especie.
  •  Coprofagía inter específica: se trata de un animal que come excremento de otra especie (perro que come la de gato, ciervo, conejo, etc.).

Explicaciones del comportamiento de Coprofagía 

  • Buscando la atención: Cuando el perro practica Coprofagía, su dueño tiende a retarlo y por consiguiente, le presta atención. Esto puede ser una secuela a una condición médica que provocó Coprofagía inicialmente y ahora que la condición médica se ha solucionado, el animal continúa con la coprofagía para recibir la atención del dueño. Esto es improbable en animales bien tratados.
  •  Conducta de Alelomimética: El perro observa al dueño que recoge el excremento y aprende de ellos a levantar la materia fecal.
  •  Conducta sabia: El perro observa a otros perros que hacen Coprofagía e imita su actividad, así desarrolla el aprendizaje de otros perros dentro de la casa o de vecinos.
  •  Conducta maternal: Una perra con cachorros hará a menudo Coprofagía, y esta conducta es normal. Hay muchas teorías acerca de por qué la perra hace esto e incluye el mantener el lugar limpio, impidiendo que el olor del excremento atraiga rapaces.
  •  Conducta de la dominancia: Ha habido informes de perros sumisos que consume el excremento de los perros más dominantes, en la misma casa. Hay otros ejemplos en la naturaleza donde los miembros sumisos de un grupo participan en conductas aparentemente raras.
  • Refuerzo: Algo al comer el excremento refuerza la conducta. Cosas como el sabor pueden ser un factor de esto. Este es el mecanismo probable de coprofagía del interespecífica como comer excremento del gato (es rica).
  • Frecuencia y calidad del alimento: Muchas personas sólo alimentan al perro una vez al día. Algunos postulan que los perros deben tener comidas múltiples a lo largo del día, naturalmente por ello acostumbran a practicar Coprofagía para complementar su horario de comida y cumplir esta necesidad. En lo posible administre alimentos balanceados de reconocida calidad. Una falta de fibra adecuada en la dieta podría derivar en coprofagía.

Diagnostico 

Debe realizarse un diagnóstico diferencial para determinar la causa que origina la coprofagía. 

Tratamiento

También dependerá de la causa. El pronóstico depende de la causa, al igual que su tratamiento. Si la causa es etológica (de comportamiento) puede intentarse: 

  • Tratamientos anti-coprofágicos: Algunas personas agregan enzimas a la dieta de un animal coprófago. La sospecha es que estas enzimas funcionan mal en el animal y se considera que ingieren su excremento para conseguir una entrada apropiada de nutrientes. Hay algunos informes que estos tratamientos funcionan bien.
  • Aversión al sabor: Este es el tratamiento más común para la coprofagía. Se aconseja a los dueños que pongan algo como una salsa muy picante en el excremento de sus perros. Previamente esta sustancia debe haber sido olida por el animal y colocada en su boca, lo que le enseña la asociación entre un olor particular y un sabor “terrible”. Para ser eficaz, debe usarse 100% del tiempo para lograr mejorar esta conducta. Cada excremento debe tener salsa picante u otro elemento de sabor nocivo en él.
  • Reto o castigo: Este es un método común de intentar, para controlar una conducta. Ladrar es un buen ejemplo, los dueños piensan que si ellos riñen a su animal por haber ladrado, dejará de ladrar. El castigo casi nunca funciona y generalmente trabaja como refuerzo de la conducta, porque el animal recibe la atención de su dueño, que es lo que realmente quiere, sin embargo, esto sólo debería usarse como un último recurso. Esto realmente puede llevar a más coprofagía.
  • Ignorándolo: Esto es usado a menudo por dueños que han deducido, que sus perros quieren llamar la atención al comer el excremento. Esto es probablemente mejor que reñir o castigar, pero probablemente no tan eficaz como reforzar con atención o premio una conducta buena.
  • Recoger las heces: Esta es una estrategia de tratamiento para prevenir el acceso al excremento por el animal. En casos extremos de coprofagía, un bozal debe ser colocado, cuando sea imposible levantar rápido el excremento. Recogiendo rápidamente la deposición, e impedir al animal comer excremento durante los paseos por lo general es suficiente. No deje que el animal vea cuando levanta las heces para evitar la conducta mimética. A menudo esto puede romper el ciclo de esta conducta.
  • Otros químicos: Por lo menos existen varias docenas de tratamientos químicos pretendidos para evitar la coprofagía, incluso remedios de homeopatía. Por supuesto, la información disponible sobre estos productos sólo es anecdótica. Algunos suplementos que se han sugerido incluyen la calabaza, mentas, papaya, semilla de anís, y piña. Si usted esta seguro de un compuesto que funcionó, por favor hágamelo saber.
  • Bozal: Si el perro realiza esta conducta cuando está solo, o come el excremento solo cuando sale, un bozal puede ser una solución práctica al problema. Si lo tolera bien, el perro podrá llevarlo puesto por períodos extendidos de tiempo, ésta puede ser uno de las maneras más prácticas de tratar con un perro que es coprófago y difícil de supervisar.
  • Espera: Anecdóticamente, ésta parece ser una conducta que ocurre a menudo en perros jóvenes. Es posible, por informe de los dueños, que el perro deje de ser coprófago a medida que se hace más grande, pero todavía hacen falta mas estudios para comprender esto.
  • Refuerzo positivo: Éste es el proceso de reforzar otra conducta en lugar de la coprofagía. Cuando el perro está a punto de comer el excremento, el dueño puede usar cualquier variedad de órdenes. "Déjelo", "Venga", "Siéntese", tirarle una pelota etc. Todos pueden y deben ser usados. La idea aquí es distraer al perro por algún tiempo para permitirle al dueño recoger el excremento en lo posible sin que el perro lo vea y hacer que el perro se olvide de la deposición.
  • Combinación: Es casi imposible recomendar un solo tratamiento como lo mejor para esto en todos los perros, porque el mecanismo y las razones por las que los perros lo hacen son desconocidos, no es conocido qué terapias de modificación de conducta serán las más eficaces. Es probable que una combinación de reforzar conductas deseadas y recoger el excremento es lo mejor para el tratamiento de coprofagía.

Sí la causa es médica, será necesario visitar a su veterinario para hacer el tratamiento correspondiente Es importante descartar causas médicas como parásitos o deficiencias de algún tipo. 

Implicaciones de salud de la Coprofagía 

En general la coprofagía es un hábito que molesta a los dueños. Lo más crítico es la posibilidad de ingerir parásitos internos. Normalmente esto pasará si el perro come el excremento de perros desconocidos infestados o el excremento de animales salvajes. Desparasitando frecuentemente los animales, se evitará el riesgo de contraer parásitos internos. Además de los parásitos internos, se pueden transmitir otros organismos como Toxoplasma presente en algún excremento de gato. Esto puede causar al perro una variedad de problemas. Intente mantener al perro lejos del excremento del gato tanto como sea posible. 

También es posible que el excremento, si esta mucho tiempo sin levantarse, puede infestarse con larvas de mosca, bacterias, hongos, etc. Esté seguro de mantener a su perro lejos de excremento extraño en el paseo y limpie cualquier excremento viejo lo más pronto posible de su patio. 

Algunas enfermedades virales caninas importantes también pueden ser transmitidas por la ruta fecal-oral y la infección podría ser el resultado de coprofagía del excremento de perros infectados. La hepatitis y la parvovirosis son dos enfermedades importantes que pueden transmitirse de esta manera". 

Fuente: foyellehow, Club Pug Argentina. M.V. Mario Miani, C. Onelli 1460 - Local 8 - Centro Administrativo Bariloche, Bariloche - Río Negro - Argentina - T: 54 - 02944 - 43 - 1721