Criar un carlino
Como preámbulo, quiero dejar claro que los veterinarios, como profesionales, son las personas mas cualificadas a la hora de ayudarnos con nuestros perros. No obstante, quisiera dar algunos consejosaportando mis experiencias en la cría de los Carlinos.
Antes de nada debemos comprobar que los futuros progenitores están sanos y estudiar un poco su genealogía. Pero además de ello, existe una serie de cuestiones relevantes:
1.-¿Qué edad ha de tener mi hembra?
No existe una regla fija, debemos observar el desarrollo de nuestra Carlina; como criterio general decir que conviene esperar como mínimo hasta el tercer celo.
2.-Mi Carlina está en celo.
Hemos decidido cruzar a nuestra Carlina en este celo, entonces aconsejo una revisión veterinaria para comprobar que todo está correcto y comentárselo al veterinario para que establezca un protocolo de actuaciones, por ejemplo, vacunarla o no herpes virus.
3.-El momento de la monta.
Existen varios métodos por los que vamos a saber que nuestra Carlina está receptiva (generalmente esto ocurre entre el noveno y el duodécimo día de celo, aunque cada hembra es diferente) tales como el frotis etcétera. Mi experiencia me dice que el método más sencillo es el natural, enseñar el macho a la hembra y, por sus reacciones, tales como levantar la cola, ofrecer su parte posterior..., sabremos que es el momento.
Externamente, podemos observar que en sus primeros días de celo la vulva se muestra dura y hay una ligera pérdida de sangre, tras ellos, la vulva, aunque inflamada, adquiere una textura más blanda y la hemorragia cesa. Generalmente, éste es el momento del cruce.
- Monta natural o inseminación. Existe el tópico de creer que los Carlinos no saben hacer monta natural, pero de los machos que he tenido en estos casi 15 años hasta la fecha todos han realizado montas naturales. No obstante, existe el método de inseminación artificial que podemos realizar con ayuda de nuestro veterinario. Decididamente aconsejo monta natural y dejar la inseminación como método alternativo en caso de que falle el primero.
- ¿En casa del macho o de la hembra? Generalmente, es un uso habitual y ley no escrita que se hace en el lugar del macho, así favorecemos que éste se encuentre en su entorno y más tranquilo. De este modo, evitamos reacciones inesperadas.
- ¿A qué hora del día? Os aconsejo que el cruce se produzca antes de que el macho haya comido ese día y, además, buscad una hora sobre todo en verano en la que no haga mucho calor. El acoplamiento dura varios minutos (generalmente de diez a quince), lo que supone un desgaste físico importante.
- ¿Cuántas montas? Habitualmente, con dos montas suele ser suficiente, eso sí, efectuadas con un día de descanso entre medias, aprovechando que el esperma dura vivo alrededor de 48 horas en esta condiciones. Excepcionalmente, se pueden hacer más montas si la hembra está receptiva.
No os olvidéis de apuntar muy bien los días de las montas, para así establecer un calendario aproximado de gestación y parto.
4.-Cuidados adicionales
- Daremos a nuestra Carlina pienso de la misma marca del habitual, pero de cachorro para que tenga un aporte extra.
- Evitaremos los ejercicios bruscos, mejor un paseo tranquilo que «actividades de riesgo».
- Le aportaremos, desde el celo hasta el pri¬mer mes de gestación, una pastilla de ácido fólico diaria para evitar paladares hendidos.
- Pasado aproximadamente un mes desde la última monta, podemos hacer una ecografía a nues¬tra Carlina para ver si está preñada y comprobar que todo va bien.
5.-¡Mi Carlina está preñada! Ahora tenemos que prepararnos para lo que viene.
- Buscaremos un lugar tranquillo de la casa, que sea cómodo para nosotros y para nuestra Carlina y pondremos allí su nueva cama. Allí seguramente será el parto, puesto que ella acudirá al lugar donde normalmente duerme.
- Aconsejo la construcción de una caja de madera (yo generalmente utilizo aglomerado forrado de fornica de 16 milímetros de grosor) de 60 por 75 centímetros de base con los laterales y la trasera de 35 centímetros de alta, dejando en 15 centímetros en la parte frontal por donde accede la perrita a su cama.
- Es muy importante que pongamos unos listones de ocho centímetros de ancho por uno de grosor todo alrededor de la caja en paralelo al suelo, con ello hacemos una especie de bastidor y evitaremos muchos disgustos, puesto que los cachorros buscan los laterales y la madre no podrá aplastarlos aunque se quedase dormida dándoles de mamar.
- En el suelo de la cama suelo poner una manta eléctrica las 24 horas al mínimo y encima de la manta eléctrica una toalla que cambiaremos frecuentemente.
6.-Se acerca el parto.
A partir del día 57 contado desde la primera monta podemos decir que estamos en «alerta roja». He comprobado que los Carlinos suelen adelantarse mas hacia 58 días que hacia los 62 (aunque esta horquilla es normal). Mis consejos son:
- Ir al veterinario los últimos días de gestación. Allí suelen realizar Rx para ver el número de cachorros, tamaño de cráneos, colocación, etcétera. Cuantos más datos tengamos, mayor será nuestra seguridad el día del parto.
- Lo que denomino el «kit del parto», el conjunto de cosas que considero indispensable tener preparadas antes del parto, tales como guantes de cirujano para maniobrar el cachorro, tijeras para cortar el cordón umbilical, cajita de cartón algo más grande que una de zapatos con una almohada eléctrica para ir depositando los cachorros, varios rollos de papel de cocina nos harán falta, hilo de bramante para atar los cordones, vaselina por si hay que ayudar a la madre, leche especifica para cachorros por si tarda en bajarle la leche a la madre y una báscula de precisión para comprobar que los cachorros crecen adecuadamente.
- No dejaremos nada a la improvisación, a última hora todo son nervios si no tenemos todo preparado.
7.-Llegó el gran día.
Nuestra Carlina no quiere comer, busca su cama y no sale de allí, empieza a rascar, suelta, un tapón mucoso por la vulva, tiene algo de calostro..., todo ello indica que se aproxima el momento. Todos los partos son diferentes y, aunque llevemos muchos años asistiéndolos, siempre existe una sobreexcitación por nuestra parte, pero cuanto más la controlemos mejor será para nuestra Carlina y para nosotros mismos.
El parto es un proceso natural y, como tal, toda ha de desarrollarse correctamente. Sólo en casos excepcionales es necesaria la intervención del veterinario (el índice de cesáreas puede estar en torno al 2%).
- Es imprescindible, y recalco imprescindible, que la Carlina tenga ayuda en el parto. Por este motivo, debemos disponer de tiempo para atenderla, puesto que los últimos días requiere una vigilancia constante. Tendremos siempre a mano el teléfono del veterinario.
- Con las contracciones (que aunque seamos novatos en la materia, podremos observar perfecta-mente) se produce la expulsión de los cachorros. Veremos aparecer una bolsa con líquido dentro (aquí viene el primer cachorrito) y normalmente, tras varias contracciones, es expulsado. Ahora llega el momento de nuestra ayuda, cuando la bolsa está en el suelo, encima de algún trapo destinado al efecto, debemos abrirla con tranquilidad pero sin demora. Cortamos el cordón -en el suelo, no levantaremos todo porque podemos herniar al cachorro-. Después sí levantamos al cachorro y limpiamos bien primero su lengua, su cara y después el resto (para esto el rollo de papel de cocina). Comprobamos que respira y nos detenemos en retirar líquidos de su cara, si es preciso lo move¬mos de arriba abajo bien sujeto para que expulse el líquido. Si fuera necesario, le practicaremos masajes en su tórax. Una vez limpio y seco, depositamos el cachorro en la caja destinada al efecto. Y nos preparamos para el siguiente cachorro.
- No pondremos los cachorros a mamar hasta que no haya finalizado el parto. Tendremos en cuenta que es una situación de estrés y hemos de mi-nimizar riesgos.
- Acabado el parto, curaremos un poco los cordones con algo de yodo rebajado con agua, pesaremos a los cachorritos y lo apuntaremos. En las primeras horas es normal una ligera pérdida de peso, después hemos de comprobar que van ganando peso diariamente.
- Comprobaremos que todos los cachorros se enganchan a la madre y que ésta tiene leche suficiente. Si no es así, ayudaremos a los cachorritos con leche para perritos.
Terminado el parto podemos acudir al veterinario para comprobar que todo ha finalizado correctamente. Los cachorros abrirán sus ojos sobre los días doce o trece, empezarán a gatear, a su destete lento y progresivo...
Debemos pensar bien antes de criar, pues llevará tiempo, nos dará pena cuando algún cachorro vaya a su nueva casa... Es una decisión que entraña mucha responsabilidad, una decisión que tiene un poco de locura, pero bendita locura.
Artículo escrito por Javier Matellan (Carlocarlin Carlinos) para la revista "El Mundo del Perro", n°357