Los carlinos son una raza de perros maravillosa pero no es una raza canina para todo el mundo.

Como defensores de esta pequeña raza, es responsabilidad nuestra el indicarles los aspectos negativos de la misma.

¿Por qué decimos esto desde MiCarlino? Pues porque queremos que los carlinos vayan a casas apropiadas para su beneficio y para el suyo propio.

 Cuando adquirimos un perro, es de vital importancia que la raza escogida se adecue a nuestras necesidades y estilo de vida. Dar con la raza adecuada es positivo tanto para el futuro propietario como para el perro que vaya a su hogar.

Hay muchas cosas que debe saber sobre los carlinos y por lo tanto, también deberá saber los inconvenientes de esta raza. En este artículo podrá observar si las características y sobretodo los inconvenientes del carlino se adaptan a su estilo de vida. Le instamos a considerar las desventajas del carlino con sumo cuidado y seriamente antes de decidirse por un carlino.

Cuestiones de salud: La fina relación entre salud y carlinos nos lleva a que son propensos a ciertos problemas, muchos de ellos genéticos, y requieren más cuidados veterinarios que cualquier otra raza de perro. Si adquiere un carlino, asuma que tendrá que realizar un montón de visitas veterinarias. Cierto es que no todos los carlinos requieren tantas visitas, pero si la gran mayoría de ellos con el gasto que conlleva. Si no está dispuesto a asumir ese gasto durante los 12-14 años de media que vive un carlino, entonces, el carlino no es la raza que usted quiere.

Pelo: A pesar de ser un perro de pelo corto, el carlino suelta muchísimo pelo por muy raro que parezca. Excepcionalmente algunos prácticamente no sueltan pelo pero por norma general, un carlino suelta demasiado pelo para ser un perro de pelo corto. Tienen un manto un tanto especial que hace que suelten más pelo que otros perros de pelo corto. Si tener pelo de carlino en su ropa, sofá y en los sitios más insospechados es un problema para usted, entonces, el carlino no es la raza que usted quiere.

Entrenamiento: Los carlinos son perros inteligentes, pero muy muy tercos. Aprenden pero lo hacen a base de insistirles mucho. Es precisamente esa terquedad lo que hace que no aprendan con tanta facilidad como otros perros de otras razas. Podemos afirmar que son perros de ideas fijas y les cuesta bastante entrar en razón, o lo que es lo mismo, hacer lo que nosotros queramos que haga. Si usted no tiene paciencia o tiempo suficiente para asumir la terquedad del carlino, entonces el carlino no es la raza que usted quiere.

Un carlino será su sombra: Y lo es literalmente. Son animales muy apegados y será su fiel sombra. Allá donde vaya por casa, si mira a sus pies, verá a su carlino a su lado. Y no es que lo hagan una o dos veces al día, estarán así todo el santo día, bajo sus pies. Algunas personas encuentran esto encantador, pero otras no. Si no está dispuesto a tener a un carlino constantemente pegado a sus pies, deberá pensar que es carlino no es la raza que usted quiere.

Los carlinos no hacen demasiado ejercicio: Por norma general, un carlino es un perro perezoso en gran parte del tiempo. Existen excepciones pero no es lo habitual en la raza. Su ejercicio consiste en paseos y alguna pequeña carrera. Si usted pretende ir a correr diariamente con su perro, hacer multitud de actividades al aire libre.... debería pensar en otra raza de perro que se adecue a estas características.

Los carlinos son perros de interior: No toleran bien las altas temperaturas ni la humedad alta. Si vive en alguna zona donde las temperaturas suelen ser altas y hay humedad, un carlino no es la mejor opción. Pueden tener problemas de salud a largo plazo o sufrir un golpe de calor.

Mantenimiento del carlino: Los carlinos necesitan bastante mantenimiento. Limpieza de la arruga, oídos, cepillado, cortar las uñas (les crecen realmente rápido), vaciarles las glándulas anales que tienen a llenar con demasiada frecuencia.....y no es para nada agradable!! Si está buscando un perro de bajo mantenimiento, sinceramente, el carlino no es su perro.

 

Si no está dispuesto a asumir la gran mayoría de los puntos expuestos, piense que un carlino es un perro muy apegado, sensible al que no le va nada bien para su salud el no cuidarlo, asearlo y darle lo que necesita con cierta frecuencia.

Si, por el contratio, usted ha leído todos los contras que tiene el carlino y decide que puede hacerse cargo de uno, adelante, son unos perros maravillosos y realmente sorprendentes, graciosos, sensibles y muy expresivos. 

No se arrepentirá de la elección.