Robo de Mascotas
El robo de perros siempre ha estado ahí, y siempre ha sucedido, sin embargo las cuestiones sociales movilizan este negocio negro cada día más.
Desde los inicios el robo de perros se destinaba a dos actividades: la cría, venta ilegal (se robaban perros de razas pequeñas, de fácil salida en el mercado), la caza (se robaban perros de caza para probarlos) y desde hace un tiempo las peleas de perros.
En los últimos años se ha detectado un incremento brusco de los robos de mascotas. ¿Qué ha cambiado?
El aumento general de la delincuencia, la aparición de mafias organizadas, y la diversificación de sus negocios ilegales, han puesto a los perros en situación de fácil acceso, máxime sabiendo que las leyes que los protegen son poco más que textos en papeles con membrete, y que sus propietarios poco podrán hacer excepto colgar carteles y desesperarse.
Incluso los Nuevos datos del American Club Kennel indican que el robo de canes se ha cuadruplicado.
"Hay razones económicas de fondo", dice la vocera del club, Lisa Peterson. "Los delincuentes los venden en Internet a compradores desprevenidos o en mercados de pulgas o al borde de las carreteras. He visto perros robados que después aparecen milagrosamente cuando el dueño ofrece una recompensa".
Hay más grupos mafiosos y más tráfico ilegal de perros que un control de la actividad final y esto es una posibilidad más de diversificación de su negocio. Hay más gente para robarlos, puesto que estas mafias ya tienen personal propio, que de igual manera sustraen carteras, coches o perros, o hasta entran en viviendas.
Llevar a los perros sueltos
Nuestra responsabilidad de propietarios, y las diferentes leyes, nos obligan a dar a nuestros perros el ejercicio físico que necesitan, y que incluye que puedan correr y moverse libremente. Sin embargo, los municipios o ciudades en general no se preocupan de facilitar espacios públicos (amplios y vallados con sensatez) para poder dejarlos sueltos de forma segura, y que no escapen ni alteren el tránsito de personas o vehículos, y puedan moverse con libertad.En realidad no existen hoy en día políticas que busquen preocuparse por nuestras mascotas ni animales en general.
En los casos más felices, hay pequeños perímetros en algún parque público, con una valla que casi podría saltar un niño (no digamos un perro), y que según el tipo de perro apenas ha dado tres pasos ya chocaría con la valla. Por eso, hay muchas personas que dejan a sus animales disfrutar de la libertad al aire libre en las zonas ajardinadas de las ciudades, algo que jamás debe hacerse en la vía pública, porque es un peligro para el animal y para el tráfico.
Hasta aquí, nuestro razonamiento sobre el hecho de llevar al perro suelto.
Lo siguiente, es que dar a nuestros animales el disfrute de esa libertad puede provocar su desaparición, y posiblemente su muerte si somos concientes de la inseguridad en la que vivimos.
Por todo esto es prioridad absoluta y es una toma de responsabilidad “llevar al perro con correa y tener control de sus actos”.
Denunciar un robo
Estamos de acuerdo en la sensación de pérdida de tiempo ante el hecho de ir a denunciar el robo de un perro. De acuerdo en que a veces se nos mira con cara de "... exagerados, por un perro". De acuerdo en que posiblemente la papeleta se quedé archivada. De acuerdo en que posiblemente nadie va a salir a buscar a nuestro perro. Y de acuerdo en que las horas de cola en una comisaría podemos aprovecharlas mejor haciendo carteles o buscando al animal directamente.
Pero si no hay denuncia, no constará en ninguna parte a nivel oficial que nuestro perro ha sido robado. Y lo mismo con las otras decenas. Y la conclusión será que cientos de perros han sido robados con destino a diferentes mercados negros, y sólo puede argumentarse una leyenda urbana. Por tanto, hay que denunciarlo. Si se denunciaran todos los casos, y hubiera cifras oficiales, podríamos estar ante una alarma social que obligara a las autoridades a intervenir. Si no se denuncia, para las autoridades simplemente se tratará sólo de rumores.
¿Qué perros se roban?
En realidad, cualquier tipo de perro puede ser objetivo de un robo, según la finalidad para la que se busque. Esto significa que no importa la edad, ni el tamaño, ni la raza ni si es mestizo.
Tampoco influye el tipo de persona que lo lleve.
¿Quién los roba?
Grupos organizados o mafias, en general por encargo para un determinado negocio ilegal, que puede suponer o no la muerte del animal.
¿Dónde los roban?
En núcleos urbanos, y en realidad en cualquier parte de la ciudad, aunque la incidencia es claramente superior en parques y paseos amplios, en los que los perros suelen ir más a menudo sueltos. Según la zona, se utiliza uno u otro método para robarlos.
¿Cómo los roban?
- Utilizando hembras en celo. Este método se utiliza cuando van los perros sueltos, pues los machos acuden a la hembra, controlada por los ladrones, y son cazados en cuanto desaparecen de la vista del dueño (a veces con un lazo). Hay un vehículo en espera.
- Utilizando un lazo. También cuando los perros van sueltos, aprovechando algún objeto o vegetación que lo tape de la vista del dueño. Hay un vehículo en espera.
- Desatándolos. Cientos de perros son robados porque sus dueños los han dejado atados en la calle para entrar a comprar en un establecimiento comercial. En el exterior de las tiendas más grandes y supermercados, suele haber siempre algún "ojeador".
- Rompiendo los cristales del coche. Cuando el dueño deja al animal dentro para irse a hacer alguna gestión. Son robos "accidentales", en los que simplemente el ladrón encuentra una víctima sin buscarla, aunque también rondan los grandes parkings de superficies comerciales en busca de algún vehículo con un perro dentro.
- Agrediendo al dueño. Sobre todo por las calles, a personas que llevan a su perro atado. En estos casos, un mínimo de dos personas, aunque normalmente son tres se dividen para hacer el trabajo. Mientras unos atacan al propietario con un arma o a golpes, el otro simplemente corta la correa o quita el collar y se lleva al perro. En muchos casos se desplazan en coche, y una vez identificada una víctima, pegan un frenazo a su lado y atacan.
¿Para qué los roban?
- Venta. Animales que se roban para ser directamente vendidos a través de Internet, de revistas de anuncios gratuitos, etc., normalmente en otra ciudad.
Se dice también que gente los roba para tenerlos de mascota, no queriendo pagar por tener un perro de raza. - Cría. La venta de cachorros en el mercado negro es un negocio creciente, favorecido por dos hechos: programas de televisión sobre "mascotas" que "venden" la imagen del cachorro dulce y desvalido, y de que tener un perro en casa es sencillo y agradable, y compradores animados por ello que no quieren pagar el precio de venta de los comercios y criadores legales. En conclusión, proliferan los cachorros en venta en el mercado negro (Internet, revistas de anuncios gratuitos, etc.) que proceden de perros, muchas veces robados, hacinados en pisos y naves, sin atención veterinaria, alimentados con lo más barato, obligados a parir dos veces al año.. Si el animal no sirve, piden un rescate; por esto se puede suponer que también se mezcla con esta mafia veterinarios o criadores conocedores del tema, en cuanto a cría de perros de raza.
- Nodrizas. Algunos criadores recogen perros para amamantar a sus numerosas camadas, ya sea por un exceso de cachorros o por que la perra madre tiene problemas para amamantar; algunos matan a esa perra luego de función si no les sirve.
- Peleas de perros. Dos perros atacándose mutuamente, en ocasiones hasta la muerte de uno de ellos. El negocio se basa en las ganancias que dejan las apuestas, y en la compra-venta de los animales que intervienen. Los perros robados con destino a las peleas no se entrenan para luchar: su finalidad es la de hacer de "sparring". Los de raza pequeña se "echan" a los cachorros que se están entrenando, y los de razas más grandes a los que ya pelean, para que hagan "mantenimiento" (en estos casos, a veces se ata el morro del perro robado con alambre o cuerda para evitar que lleguen a morder al defenderse).
- Alimento. Ha habido casos reportados en el mundo de algunos productos de alimentos caninos que buscan perros para sacarle sangre y agregar esta a la preparación de alimentos y fortificarla; luego ese perro se mata o devuelve a la calle.
- Textil. Casi todos conocemos la terrible realidad del mercado de pieles de perro y gato provenientes de China, para la industria textil: peluches, cuellos y puños de abrigo, chaquetas, foulards, etc. Pues bien, no todas las pieles de perro que se comercian en vienen de China.
- Otra teoría, la más terrible, es que los animales son asesinados, bien en rituales satánico; bien para utilizar su piel y su carne.
- Zoofilia. No hay datos al respecto del sexo con animales, pero lo mencionamos en tanto que es una actividad (tipificada como delito en algunos países) presente .La zoofilia puede incluir la muerte del animal.
¿Cómo prevenirlo?
Lamentablemente, es muy difícil evitar el robo de perros, pero hay algunas medidas de precaución para disminuir el riesgo:
En los parques.
- Elegir espacios amplios y despejados para soltar al animal, sin papeleras, bancos, vegetación, etc., que puedan ocultarlo a la vista en ningún momento.
- Si no hay más remedio, limitarse a dejarlos sueltos sólo en las zonas valladas para perros.
- Los ladrones estudian los movimientos de la familia y aprovechan estas ocasiones para llevarse al perro;por lo que se recomienda cambiar de rumbos siempre en el paseo.
- En las concentraciones de perros y personas la cantidad de perros debe ser igual o menor a la de personas para mantenerlos controlados.
- En los paseos de grupo, que siempre haya alguien vigilando a todos los perros.
En la calle
- Llevarlo siempre atado. Colgar del collar una chapita identificatoria (con el número telefónico) puede ayudar a encontrarla, en caso de que se pierda.
- Evitar las calles estrechas y de poco tránsito.
- Evitar las horas de poca gente en las calles.
- Elegir aceras anchas y bien iluminadas.
- Vigilar los vehículos que puedan estacionar al lado de forma repentina.
Aya a otros
- Si detectas a algún criador ilegal o de perros de dudosa procedencia, denúncialo.
- Si alguna vez has comprado un perro a un particular con malas condiciones de cría y sin las normativas correspondientes, denúncialo.
- Si conoces algún lugar sospechoso de peleas de perros o de hacinamiento canino, denúncialo.
- Si han robado a tu perro, denúncialo
Finalmente, no comprar animales si se duda de su origen. Si existe gente que roba perros para venderlos es porque alguien los compra. No seamos cómplices.
Fuente: Club Pug Argentina